Santuario de Nuestra Señora del Acebo
Edificado en 1575, en piedra pulida y con apariencia sobria, la historia de este Santuario viene acompañada desde sus inicios por multitud de episodios que narran los milagros de la Virgen del Acebo, una talla románica del siglo XIII, en su origen una imagen de la virgen sentada, completamente realizada en madera. A lo largo del tiempo, el cuerpo esculpido fue sustituido por ropajes y mantos que cubren un armazón, manteniendo la cabeza de la talla original, y la figura del Niño Jesús fue sustituida en el año 1900, debido a su deterioro.
El retablo mayor, del siglo XVII, es obra del escultor cangués Manuel Ron de Pixán, y se engloba en el estilo barroco difundido por el Taller del Monasterio de Corias.
Se sitúa en un alto, a unos 12 kilómetros de Cangas del Narcea, y desde allí se pueden obtener unas prodigiosas vistas del concejo de Cangas del Narcea